Un arquitecto hoy en día tiene múltiples herramientas para llevar a cabo sus ideas,
el uso de la tecnología a ayudado en gran parte, ya que gracias a ella hemos podido facilitarnos la creación, el dibujo y la visualización de los proyectos que realizamos, incluso a cambiado la forma en la que se presentan dichos proyectos a nuestros clientes; sin embargo, la más recurrente forma de expresión que tenemos es el dibujo a mano, el sketch arquitectónico.
Desde el principio de los tiempos el dibujo a representado un gran medio para dar a conocer nuestras ideas, una prueba de ello la podemos encontrar en los dibujos rupestres y conforme el ser humano fue desarrollando sus capacidades esta técnica también fue evolucionando, como se puede apreciar en los famosos dibujos y planos creados por los artistas, diseñadores, arquitectos e ingenieros de la antigüedad.
El sketch arquitectónico hoy en día representa la manera más sencilla de soltar nuestra imaginación y plasmar nuestras primeras ideas en papel para posteriormente digitalizarlas en las plataformas de renderizado o visualización 3D. Es la base de todo diseño y lo primero que los estudiantes deben aprender al comenzar su carrera como arquitectos.
Un buen sketch pude llevarse a cabo en cualquier sitio mientras tengas las herramientas adecuadas las cuales consisten en papel y lápiz. Cada persona tiene una manera de dibujar muy diferente lo cual hace que cada dibujo sea único, hay personas que se enfocan en dibujar lo más real posible haciendo que cada línea y trazo se asemeje al objeto que están viendo o visualizando en su mente, mientras que otros dejan volar su trazo exagerando las formas y colores para lograr un efecto más abstracto o particular para realzar objetos específicos como escalas, detalles, edificios o incluso los colores y texturas.
Existen millones de técnicas y formas de hacer un buen sketch, hay personas que los realizan usando tinta, lápices, colores e incluso la acuarela; unos aman el color mientras que otros deciden expresarse a blanco y negro. No existen técnicas erróneas para esta clase de arte, ya que su principal objetivo es proporcionarnos la idea general, el concepto y la dinámica en un proyecto.
La imaginación y la creatividad son factores clave para lograr un buen boceto, la representación de texturas, acabados y elementos debe tomarse en cuenta para lograr un resultado satisfactorio en tu trabajo; si crees que tus dibujos aún no son lo suficientemente buenos a continuación te diremos algunos concejos y tips que nosotros hemos seguido y que nos han resultado para mejorar nuestro trazo.
La clave de cualquier cosa es la práctica, intenta dibujar algo todos los días no importa si es pequeño o grande, el realizar un bosquejo diariamente te ayudara a dominar mejor tu trazo.
El sombreado es la clave en cada dibujo para lograr un buen efecto. Si usas lápiz para dibujar aprovecha las tonalidades que este ofrece para jugar con la luz y la sombra en tu boceto, realiza un ejercicio para ver que tan claro y que tan fuerte puede llegar tu lápiz para saber como usarlo a tu favor. (no olvides que el borrador siempre es un buen amigo).
Si trabajas con estilógrafos cuida siempre tus grosores de línea o trabaja con diversos puntos para hacer más sencilla la representación de volúmenes, practica diversas formas de representar texturas.
Para lograr una imagen coherente intenta trazar siempre los puntos principales de tu perspectiva. Cuida siempre tu escala y proporciona lo mejor que puedas.
No importa si tus líneas aun no son precisas, muchas veces aquellas que pueden parecernos un error al trazo, ayudan a hacer un dibujo más interesante.
No tengas miedo al dibujo todos empiezan de la misma manera, lo importante es dedicarle tiempo y paciencia para encontrar tu propio estilo y divertirte creando nuevos espacios y representaciones; con el tiempo aprenderás que incluso el bosquejar antes de realizar cualquier proyecto te ayudara a hacer trabajos más creativos y menos cuadrados que incluso te facilitaran la visualización para realizar tus modelos a computadora.
Comments